Va un camionero al dentista todo acojonado.
-Oiga, me duele la muela.
-A ver, abra la boca.
-No, que tengo mucho miedo...
-Mire, ¿sabe qué haremos?,
-Oiga, me duele la muela.
-A ver, abra la boca.
-No, que tengo mucho miedo...
-Mire, ¿sabe qué haremos?,
le doy esta botella de whisky,
usted echa un trago, y verá como se le pasa el miedo. Al rato, el camionero ya ha dejado la botella totalmente vacía:
-Qué... ¿se siente más valiente ahora?
-Sí... a ver quién es el guapo que me toca ahora la muela.
No hay comentarios:
Publicar un comentario