domingo, 4 de septiembre de 2011

Como si fuera


No quiero santificar Tu nombre
pero lo santifico y doy mi sangre.
Estira Tu mano y llévame contigo
a Tu reino
aunque no sea Tu voluntad.
Eres mi señor
y debes cuidar de esta sierva
ante Ti y rodillada
 mira mi abatimiento,
 sácame de mis angustias
de este valle de
 lágrimas en el que vivo
mis días están en Tus manos
mis manos alzadas

 sólo ansían Tu voluntad
llévame contigo
como si fuera Tu hija o tu siervo
como si fueras Mi Padre
presta oídos a mi ruego
como Dios,
 a Sus  criaturas les llamas hacías adiós

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